[post_page_title]Seguía el peligro[/post_page_title]
Nos parece bastante loco usar una aplicación de un restaurante para pedir auxilio. Uno pensaría que, dado que Cheryl ya tenía el teléfono en su mano, ella debería haber llamado a la policía directamente. Pero la realidad es que su novio aún sostenía el cuchillo en su mano mientras conducía el auto y la estaba observando como si fuese un halcón.

Cualquier movimiento sospechoso, aunque fuese una rápida llamada, habría despertado su atención, poniéndola a ella en peligro. La mujer estaba tratando de mantenerse a salvo a cualquier costo.