[post_page_title]Despedazándose[/post_page_title]
Para empeorar las cosas, parecía que todo en el hotel estaba roto. Varios de los muebles del exterior y del interior no solo estaban obsoletos e inutilizables, sino que incluso el ascensor estaba cerrado por “reparaciones”.

El entorno exterior del complejo también estaba descuidado, con muchos de los caminos de piedra desmoronados y destruidos. Sin embargo, lo peor de todo fueron los baños junto a la piscina, que Gayle describió como que aparentemente nunca se habían limpiado.